viernes, 30 de diciembre de 2011

Despierto en 2011 y me acuesto en 2012



Tremendo año el que se va. Un año mas pasando por este mundo y tal vez con nuevas propuestas para el 2012 ¿Metas? ¿12 uvas para 12 propósitos para el nuevo año? ¿El fin del mundo? ¿Buscamos un avión como en la película y huimos hacía China? No creo en las uvas, las lentejas en la billetera o en correr por toda la cuadra con las maletas, ni me provoca correr.

El 2011 no ha sido un año fácil. Se traduce en campañas electorales agónicas, grandes voces que se han ido, la tierra moviéndose de un la para otro, climas que enloquecen y noticias poco alentadoras, sin embargo no ha sido todo un caos como en todo hay gente buena, noticias geniales, sol en verano. No creo en las cábalas pero si en despedir las cosas buenas, aprender de los errores y ver las cosas que no fueron tan buenas y entender que siempre pueden tener un lado positivo. Si hago un balance de este año lo que he ganado ha sido la oportunidad de descubrir que realmente hay amigos que están en las buenas y en las no tan buenas. Este año agosto y setiembre fueron duros meses de aprender que a veces la vida uno no la tiene comprada. Las inseparables del colegio estuvieron conmigo desde Chaclacayo, Madrid y Lima. Mis primeros amigos de la universidad y tal vez los más cercanos que tengo me acompañaron comiendo, riéndose y con mucho sushi. Las clases de quechua me trajeron a dos amigos excelentes que se pasaron horas escuchándome y gente nueva que me dio un gran apoyo. Amigos que encontré por el camino me enseñaron a no llorar, a encontrar trabajo y tomar café. Desde Alemania mi amiga/alumna mando buenas vibras y también personas que andaban con su propio dolor se dieron un espacio para hablar conmigo. Gracias Mari, Patty, Ashie, Mario, Xime, Rose, Mena, Dear S, Raúl, Loló, Ale, Natchen, Michel, Pabs, Desi, Rai, JP, Mili, Antro, Claudinchen, Berthi, Alfredito. Además de una familia con salud y como siempre digo "bonitos y gorditos" y Andresito que ha superado las expectativas de todos y de todo. 

Buenas clases en la universidad, una aventura editorial nueva, mejoras en las técnicas de repostería, nuevos y buenos libros, un blog que crece y algunas ideas literarias que surgen, chocolates, vestidos nuevos, amigos nuevos, algo de alcohol por ahí, películas de Audrey Hepburn, conocer nueva música, incursionar en el cine italiano, trabajos nuevos, pinturas, ricas comidas y sonrisas nuevas por conocer. Todo eso también ha sido el 2011.

Los años son mediciones creadas por el hombre, pero el tiempo es lo que fluye siempre con vaivenes a veces llenos de luz y de vez en cuando con algunas sombras. Espero que el 2012 esté lleno de luz y en todo caso nosotros podemos hacer la luz.  Se nos viene derechito el año del fin del mundo. Como un amigo dijo una vez "Si el fin del mundo es como el poema de Gorostiza yo quiero que llegue". A despedir el año y esperar que el que llega nos sonría. 

La canción del año: Rezo por vos
El libro del año: Del amor y otros demonios
La fecha del año: 21 de setiembre
El regalo del año: Mi sábana morada de plumas
La llamada del año: Las que recibí desde Ayacucho el día de mi cumpleaños
La película del año: Charade
El encuentro del año: Hallar mi árbol cronológico de Cien años de Soledad.
La decisión del año: Ir a ver teatro y ballet juntas (Con mamá)
La nueva amiga del año: Natalia Sánchez
La comida del año: El mega almuerzo que hizo la Tati por mi cumple

Y por favor 2012 no te lleves a ningún otro buen cantante. Los que se fueron pero sus voces quedan.

Una de las mejores voces, siguió el camino de mucho...

Mis arullos de la infancia, una voz que se fue con mucho dolor.


FELIZ AÑO A TODOS !

viernes, 23 de diciembre de 2011

Guirnaldas y luces de colores

Sin duda la Navidad es mi temporada favorita del año. La casa está llena de color, el árbol, las guirnaldas y ya cerca al 24 la preparación de la cena. No se equivoquen, no es el lado frívolo de la navidad. En esta época es cuando comparto una cocina con mi mamá y mi Tati. Son horas de horas en el piso con Andrés y mi tío Pacho jugando con los nuevos juguetes. Son lonches y cenas los días previos con amigos. La navidad trae pequeños detalles que sacan sonrisas y mejor humor. Es el espíritu para continuar el año siguiente.

Los dejo con algunas de mis películas, videos, canciones o especiales favoritos para Navidad. Dignas de ser vistas con un sándwich de pavo, un poco de puré de manzana o un chocolate caliente.

Miracle on 34th Street es una de las historias más tiernas.


The Grinch nos enseña que todos pueden querer la navidad y preocuparse por los demás.



Judy Garland Christmas Special una excelente voz también en navidad.



Let it snow. Algún día espero tener una navidad blanca, luego regreso a mi navidad con verano. 


El clásico de diciembre Cascanueces
  

ESPERO QUE TENGAN UNA EXCELENTE NAVIDAD, llena de abrazos y con sus familias.  

viernes, 9 de diciembre de 2011

Una navidad para todos

Estoy convencida que diciembre no es la única fecha que tenemos para ayudar, pero seguramente es la época del año donde tenemos tres veces más razones para hacerlo.  Algunos tratan de ayudar todo el año, otros de vez en cuento. Lo importante ahora es saber canalizar estas intenciones. Les dejo está excelente iniciativa que vi hoy en el blog de Mamá de Dos Chancletas.

"Mamá de DOS chancletas y ParaPekes se unen esta navidad para hacer una fiesta, pro fondos, ropa, juguetes y libros para las niñas y los niños trabajadores de San Juan de Miraflores, que participan de los programas de atención de La Casa Panchita..."




¿Dónde? Juan Fanning 325, Miraflores
¿Cuándo? sábado 17 de diciembre
¿Turnos? 2:30-5:00pm y 5:30-8:00pm
Costo de entrada: Niños S/. 20 soles + Donación de juguete ó libro ó ropa en buen estado. Adultos S/. 3 soles. La capacidad es limitada, máximo 45 niños por turno.
Reservas: 241-7960 informes@parapekes.pe

lunes, 5 de diciembre de 2011

Vainilla Late

- Vamos al lago.
- Debe estar congelado
- Vamos, vamos a caminar
- ¿No tienes frío?
- ¿No tienes ganas de caminar?
- No
- Pero que aburrido Gustavo.


Tenías la nariz fría cuando me desperté. Las pequeñas pecas en su espalda y su cabello, quería ver su rostro, no quería moverme para que no se despierte pero quería que volteara a verme ahí, como la noche anterior. La ventana opaca por la niebla que bajaba, con el cielo que se caía para recordarnos el invierno y mis dedos sobre tu hombro ¿y si tenías frío? Quería sigas el final de mis pasos hasta la puerta del cuarto y me pidieras que regrese. No te despertaste y sólo tu gato me siguió hasta la puerta como para cerciorarse que cierre. El ascensor no llegaba y las hermanas del 64 salieron. Mirada directa a la camisa fuera del pantalón y a los zapatos en la mano. Esta vez mi sonrisa no fue suficiente para evitar los cuchicheos en un francés masticado por las dos solteronas. El primer piso se hacía eterno y la luz nunca se iba a prender. Tocamos fondo y las puertas al fin se abrieron. Ahí en el piso me puse los zapatos y paré el taxi, miré pero tampoco saliste por la ventana. 

Llegué al estudio con el celular en la mano, por si vibraba, por sonaba. Ni uno ni otro, ni ruido ni luz. Estaban las modelos, estaban las luces y seguía sin poder ver el ángulo, no encontraba la luz ni la composición. Tenía el celular en el bolsillo, el blackberry muy cerca y ninguno sonaba. Ni en el almuerzo ni para la cena, tampoco en el octavo café de la madrugada. No llamaste sino hasta dos días para pedirme el disco de Nina Simone que me encargaste, me pediste que lo envuelva porque era para un regalo. Encargaste el vinilo hace 3 semanas, mejor que lo dejen en tu casa dijiste, te ibas de viaje sin mayor aviso. Mi casa, tenías llave, ropa y sin embargo nunca me tocaste más que como amigo, nunca me miraste hasta aquella noche para que a la mañana siguiente siguieras durmiendo.

- Vamos a cenar y te llevó el disco.
- Tengo una cena, pero paso por tu casa a las 6.
- Está bien.

La voz de Simone, por la ventana la nieve había caído la noche anterior. Toda la noche copo a copo se llenaron las calles. Llegaste a las 7 para despertarme. Un sonido agudo y continuo, sólo te detuviste cuando llegué a la puerta, sonrisa puesta y cartera en mano. “Una ducha y algo de ropa” no entendía que hacías tan temprano en casa, como nunca, querías salir a caminar. Justo con las calles de nieve querías ver qué pasaba con los patos, si funcionaba la pista de patinaje, si ya había aprendido a patinar. Cuando salí del cuarto ya estabas de regreso con dos envases en la mano “están un poco calientes” no terminaste de hablar y ya estabas camino al ascensor. No me había despertado pero en esas cuatro paredes que bajaban pude oler el jazmín de tu cabello, tan cerca como el olor del vainilla late. 

- ¿El azúcar?
- Solo una cuchara de azúcar.
- Gracias
- Pero que pocas ganas de endulzarte la vida Gustavo
- ¿A dónde me llevas?
- A la nieve

Te encantaba cruzar entre los taxis amarillos, estabas segura que ante tu silueta se detendrían, tal vez era el olor a jazmín, tal vez. Seguimos caminando, la pista no estaba abierta, no habían patos pero si una banca frente al lado. Tenías las manos congeladas. Un sorbo y hundiste tu rostro en mi brazo, te aferraste casi a propósito para que pudiera oler tu cabello, tan dulce, una tentación. Un sorbo de vainilla, un poco de cordura y de regreso a tu cabello negro. 

Fly me to the moon and let me play among the stars… Tu LP favorito y me pediste poder bailar una pieza más. Tu hermana vestida de blanco y tu hablando mal de tu yerno. “Todo matrimonio pasa mejor cuando ponen una pieza de Sinatra”. No soy un maestro en el baile pero podía hacer el esfuerzo, no éramos los únicos en la pista. Te aburriste, no era suficiente una pieza de Sinatra, el matrimonio era impasable. Corrimos al carro y sin aviso, tal vez como siempre había esperado que fuera, me besaste. Fue un beso veloz que término en tu departamento, en semáforos rojos que no vi, en escaleras que nos comimos para llegar rápido, un par de tacos en la sala y un portazo para que el gato no entrará. Tal vez tus vecinos nos escucharon, tal vez el gato se ofendió, estoy seguro que estuvo bien y luego te volteaste a dormir. 

- ¿Te gustó el café?
- Claro….
- ¿Le eché mucho azúcar, no?
- Bueno, un poco….

No me importaba el azúcar, en verdad estaba perfecto pero quería que me engrías más, que me note, que me miré sin pedirme algún favor, sólo que me mire. Te levantaste y seguiste el camino, casi sin esperarme, salimos del parque, me diste un beso y un hasta luego. 

- ¿Cenamos mañana?
- No puedo
- ¿Desayuno?
- Veremos, pero no esta semana
- ¿Cuándo?
- Deja que te llame

Esperé la llamada, no contestaste el teléfono, el gato estaba encargado donde el vecino y los muebles ya no estaban. Espere un mail, una llamada, un mensaje. Espere con el olor de tu cabello guardado en la memoria, esperé viendo fotos antiguas y escuchando el LP de Sinatra que dejaste con mi nombre junto con la caja de damas chinas, pero ya no tenía con quién jugar. Me llevé al gato a la casa, no me hacía caso, no tomaba la leche pero si coca cola. Me miraba, te buscaba entre la ropa, yo te buscaba entre los pasos del gato y tampoco te encontraba. Los días pasaron, los meses. El gato ya come y toma leche y yo al menos ya tengo con quién jugar damas chinas aunque no huele a jazmín. En medio de una de esas partidas sonó el timbre, pero no con tu insistencia. Unas preguntas, una firma y me entregaron una postal. 


Le Petit Prince. He conseguido una copia en francés, te encantaría verla. Espero que estés bien. Me vine a Paris a buscar nuevos aires. Aún no sé que busco, pero sé que cuando volteo a ver quién camina detrás espero que seas tú pero es cualquier francesito. Nunca hablamos de nuestra fiesta en el matrimonio de mi hermana, no he hablado pero no me he olvidado. Qué pena que las postales no son más grandes. 

A.


¿Cómo puedo regresar a jugar damas chinas con una postal así?

domingo, 4 de diciembre de 2011

Una lista para Papa Noel

La semana pasada ayude a mi hermano a escribir su primera carta oficial para Papa Noel.  Mientras Andresito escribía me di cuenta que hace mucho tiempo no escribo una carta, no doy una lista de regalos, así que me puse manos a la obra. Espero que haya internet en el Polo Norte y que Papa Noel caiga por estos lares bloggeros y lea mi lista. Al fin y al cabo he sido una buena niña y carbón no me podrá traer.

Quiero una bicicleta para irme a la universidad con la cesta adelante. 

Un tocadiscos como para que suene en mi cuarto.


Y claro... si te haces la del tocadiscos también unos LP como Artaud.

Muchos libros, se aceptan recomendaciones y de ser posible Moby Dick. 

Un rico café todas las mañanas como para acompañar los libros. 

Una oktomat para tomar fotos mientras tomo el café.

Unas converse moradas (que busco hace cuchumil años)

Y además, claro si no es pedir mucho, sería genial si por ahí me puede hacer llegar mas utensilios de repostería, las pantuflas de Hello Kitty, la respuesta para estar flaca sin dejar de comer, una moleskine, unas oxford negras y otras rojas... mejor voy cortando esta entrada porque la lista puede seguir por la eternidad. 

Todos debería hacer listas para Papa Noel, al final todos llevamos un niño adentro. 

viernes, 2 de diciembre de 2011

Los 5 Libros - Día 5

El Clásico

Casi todos en algún momento hemos leído, hemos escuchado hablas o hemos visto la adaptación al cine de este libro. Como no dejarse cautivar por una historia de amor de finales del siglo XIX. Para mí, este junto a varios otros más es uno de los clásicos de la literatura hispana y un esencial si lees a García Márquez.



jueves, 1 de diciembre de 2011

Los 5 Libros - Día 4





El libro de Arte

Mario Testino es sin lugar a dudas uno de los peruanos más reconocidos a nivel internacional. Hace ya casi dos años, junto a Kate Moss, inauguro la muestra Portraits en el MALI. Muestra que ha recorrido ya varias ciudades del mundo y que se basa en el libro del mismo nombre.

Este además de "The 4 Dreams of Miss X" es uno de mis libros favoritos de fotografía y uno de los grandes tesoros que componen mi biblioteca.