Este sábado 10 de noviembre las calles se llenarán de P.U.T.A.S que buscan dejar de ser reconocidas sólo como objetos. Este sábado 10 tenemos la opción de dejar escucharnos en cada esquina, en cada semaforo donde podemos ser víctimas del acoso callejero y así demostrarle a la sociedad que no somos objetos y que no hemos venido al mundo para hacer que los hombres "se sientan más hombres".
Es importante asistir porque creo que todas las mujeres deben empezar por detener, ya no es suficiente hacernos las locas, mejor enfrentar. No somos animales para que nos silben en la calle, debemos poder salir solas sin tener que tener miedo si alguien nos silba en la calle, poder subir a un micro sin andar cuidando de que otro pasajero se te pegue. Salir a la calle no nos debe dar miedo, debemos criar niñas no enseñandoles a cuidarse sino niños que entiendan que deben respetar el cuerpo de los demás. Si quieres un cambio, sin importar el género, únete este sábado 10 de noviembre desde las 10:00 m en el Campo de Marte.
Novela corta, pero necesaria de Thomas Mann. El esteticismo de la decadencia se ve presentando en sus formas más imperecederas e inolvidables. Aschenbach busca en Tadzio la fuente de inspiración y la plenitud. Esta adoración del viejo intelectual por el joven hermoso representa no sólo la eterna lucha de la razón frente al instinto. Además, la belleza está siempre presentada en contraposición a la decadencia: en este caso a que Venecia está invadida por la cólera. En general, el libro muestra una concepción del mundo en que el arte y la vida están incondicionalmente relacionados con la muerte, no son auténticos sin su presencia.
Es una novela emblemática de la escritora inglesa, Virginia Woolf, debido a sus técnicas de vanguardia: el monólogo interior y focalización múltiple, que deriva en una narrativa fragmentada, sin una voz omnisciente que guíe a los personajes. Ambientada en una Londres ya desaparecida, Clarissa Dalloway y su contraporte Septimus, representan la insatisfacción en un mundo basado en la apariencia de felicidad, prosperidad y decencia. Junto con otros personajes, el tema recurrente de la novela será el sinsentido de la vida y la búsqueda constante de la satisfacción, a través de paisajes emocionales y sensaciones intensas, principalmente femeninas.
Personalmente, mi novela favorita de Vargas Llosa. En esta conversación entre Zavalita y Ambrosio, el antiguo chofer de su familia, se sintetiza no sólo la problemática de una familia limeña de clase alta, sino la del Perú durante el gobierno de Odría, en el que el pasado de ambos personajes se desarrolla. El gobierno de Odría, basado en la corrupción y el autoritarismo, es un ambiente ideal para la introducción de personajes fracasados y sólo triunfadores a través del engaño, la estafa y la mentira. El destino del protagonista se ve reflejado en el de una ciudad, en el de un país, en el borde del abismo.
Es una novela, cuya trama podría interpretarse como la manera en la que cada ser humano experimenta el amor, la pasión, el compromiso, los celos y el sufrimiento. Tal vez, una enumeración temática acerca de esta novela de Kundera, sería injusta. Quizás, es la complejidad de los personajes y de sus configuraciones psicológicas lo que hace que el lector no se quede atrapado con la trama, sino más bien, se fascine tratando de entender las acciones y conjeturas de los propios personajes. Una novela que logra su objetivo: la reflexión acerca de la vida humana.
Los 5 libros están de regreso ahora con la excelente recomendación de Fiorella Vasi. Mucha atención a las recomendaciones de esta semana y si les gusta a correr a conseguir el libro.
Día 1 - RAYUELA
Esta novela es uno de mis libros favoritos. Principalmente, por la interpretación delirante de la realidad que proporciona Cortázar al presentar a sus personajes a través del monólogo interior y el flujo de asociaciones. Estas confluyen con el afán esteticista y artístico del que están rodeados los personajes del Club de la Serpiente y con la desesperación y la incertidumbre ante el mundo que Oliveira o su alter ego argentino, Traveler, despliegan a través de libro. El amor y el dolor se entretejen en un relato sin trama, repleto de sensaciones y de estados emocionales, en el que los hechos se ven subyugados por la subjetividad del que describe y del que lee.
De los 7 días de la semana por lo menos en dos de ellos me pongo a pensar en lo anacrónico de mi existencia y la imposibilidad de haber nacido en otro momento. Levantarme y arrastrarme hasta la clase de las 9 de la mañana para escuchar cómo es que Arguedas le escribía cartas a Juan Rulfo donde le hablaba de “Juan” y mencionaban a “Don Alejo” y yo acá escribiendo en el wall de alguna de mis amigas sobre las fichas para el examen parcial de latín.
¿Dónde han quedado aquellos momentos en que uno recibía cartas? Solo hay dos personas con las que he compartido “correspondencia” una de ellas es mi madre y la otra mi mejor amiga Marisella. Con nostalgia recuerdo los paquetes de carta que mi mamá alguna vez guardó y ahora todos han perdido y no puedo dejar de pensar en Arguedas escribiéndole cartas a Rulfo, en las historia del momento en que Octavio Paz conoció a Blanca Varela, como es que sus amigos salvaron a Machado y este camino a Soria se enamoró. Me enloquece pensar que todos aquellos maravillosos relatos existen y que yo no los podré vivir, que nunca estaré en el barrio latino con César Moro aprendiendo del Surrealismo para luego ir a vender con Julio Ramón sus libros por unos cuantos cigarros.
No creo que ni una sola persona no se ha puesto a pensar en algún momento de su vida en la posibilidad de haber nacido en otro momento, ya sea en el conocido y anecdotico pasado como en el imprevisible futuro. Yo lo hago a menudo por lo que leo, lo que escucho en clases, la música que oigo y las anécdotas de las letras. ¿Dónde más te hubiera gustado vivir? Yo quisiera regresar a aquellos años donde no había computadoras y todos tus trabajos los hacías en máquina de escribir. Los días preciosos donde te llegaban cartas en lugar de correos electrónicos, donde los celulares no te agobiaban y ponías un cassette para cantar como desquiciada con tu walkman. Así es, yo recuerdo eso días, porque pase del walkman al discman, al mp4 y no llego al iPod porque ni los entiendo. Yo quiero los días donde la información la encontrabas en las bibliotecas. Hubiera sido feliz medio del barrio latino de París, en los boulevards de Baudelaire, caminando en aquella fría Buenos Aires con Borges, Bioy y las Ocampo. Como sea, el tiempo es inexorable y aquello que nos cuentas jamás ha de volver, sin embargo yo no pierdo las esperanzas de aquellos días como si en un sueño pudiera regresar a esos días, tal vez con la misma naturalidad de unas películas. Espero cerrar los ojos y amanecer un día en una película de Woody Allen.
El jueves 27 de setiembre hicimos una simple pregunta y muchos nos contestaron exactamente ¿Quién necesita el feminismo? No se olviden de ver todas las fotos completas desde el 22 de octubre en la página oficial de facebook de Who needs feminism?
