Anacrónico

Ante la incertidumbre de esta nueva palabra corrí a descubrir su significado y luego de algo de información obtenida por los pasadizos de la universidad llegué a un diccionario. Justo de bajo de Anacreóntico (Propio de Anacreonte) encontré esta palabra.

Anacrónico, ca adj. Que adolece de anacronismo.

Anacronismo (gr.aná, contra y chronos, tiempo) Error consistente en dar como acaecido un hecho en tiempo distinto de aquel en que ocurrió. / Cosa no conforme con los usos de una época.

Como me explicaran unos momentos antes, una cosa anacrónica es aquella que no está en el tiempo indicado, es decir si estamos en el presente, puede que ella siga en el pasado. ¿Tal vez algo anticuado? Claro ¿Por qué no?

Luego de explicar lo que está palabra significa paso a relatar los hechos que me llevaron a descubrirla, no de una manera muy convencional, pero como dice mi papá, uno nunca deja de aprender.

Luego de un pequeño paseo por la universidad divagando con mi compañera tenística sobre nuestro pronto encuentro con Andy Roddick mientras pensaba en las musarañas y el frío que iba a tener cuando saliera de clases, mientras me di cuenta que mis pies me llevaban de vuelta a mi clase de Introducción a las Sagradas Escrituras me encontré con algunas personas conocidas. Para ser más exacta dos, una más conocida y algo mal ecuánime que la otra. Unas cuantas palabras y de repente resulta que soy anacrónica. (¡qué anacrónica que eres!)

Entonces, con la duda sobre el significado de esta palabra y con ganas de comer una torta de chocolate es que llegué al salón 219. 2 horas de clase, dos botellas de gatorade y un cartucho de pluma después seguía con la misma incertidumbre ¿qué demonios es anacrónica? Ahora ya lo sé y sé que por algún modo puede ser cierto.

Desde muy pequeña he tenido la sensación que no correspondía exactamente a la época en la que nací, claro que tampoco es para que en medio de la nada alguien me diga anacrónica incluso cuando el término está mal usado. Pero si de cierto modo tengo la sensación que debí haber nacido un poquito antes, tal vez con un poco menos de tecnología y un poco más de sensibilidad. Tal vez no fui el espermatozoide indicado o el óvulo adecuado, no fui la unión justa en el momento justo, pero me tocó vivir ahora, así que creo que no me queda más que seguir adelante.

Es todo lo que puedo decir de mi nuevo “titulo” anacrónico. Aún sigo pensado en lo bizarro de la situación.

Para aquellos que justan del tenis: Male y Loló entre Andy Roddick y Rene Lacoste.